¿Acaso Dios odia a la humanidad?

Se ha preguntando porque Dios no hace nada frente a las catástrofes que pasan en el mundo y aun cuando la mayor parte de los afectados son niños.

Ha cuestionado alguna vez a Dios por no hacer nada ante pervertidos que destruyen la vida de pequeños abusando de ellos.

A lo mejor ha dicho alguna vez porque le pasa tal desgracia a esa persona que no le hace daño a nadie y nunca ha hecho mal a su prójimo.

Han dicho a Dios porque no alivia el dolor de los enfermos, el hambre de los pobres y defiende la causa de los indefensos.

Creo que tenemos muchas mas pregunta que podemos hacer para cuestionar a Dios que si realmente AMA la humanidad o la ODIA.

En mi experiencia personal con estas y muchas mas preguntas de cuestionamiento, he decidido no entender a Dios pero si estudiar a Dios cuando estuvo en la tierra a través de su Hijo Jesús.

Jesús en un momento de dedicación que le hacían, una mujer interumpio la reunion y en medio de toda la gente rompió un perfume muy caro en sus pies y comenzó a enjuagar con el cabello y sus lagrimas; ella lo hizo por el amor que sentía ya que Jesús había perdonado sus pecados; entonces la persona que manejaba las finanzas en el ministerio de Jesús llego a decir “Que hace esta mujer, con el dinero que cuesta ese perfume se podría dar de comer a muchos pobres” parece que este discípulo de Jesús, tenia un corazón conmovido por los pobres pero en el evangelio de Juan describe que este hombre era Judas el que traiciono a Jesús, y el lo dijo no para dar de comer a los pobres sino porque el hurtaba del dinero que tenia en el ministerio de Jesús.

Jesús le dijo una verdad a Judas “A los pobres siempre tendréis”, cuando entendí eso pude ver un poco mas allá de mis cuestionamientos acerca lo que esta pasando en nuestro mundo.

Comencé a ver la vida de Jesús a través de la Biblia y pude darme cuenta que durante los tres años de ministerio en la tierra, lo que mas paso haciendo era aliviando el dolor de su pueblo, es verdad no a todos ayudò pero si a los que tenían fe.

Ahora si contamos las historias en los cuatros evangelios vemos que Jesús sano a muchos pero cuando leo el ùltimo versículo del evangelio de Juan veo que el hizo la mayor cantidad de obras que jamás un hombre en la historia haya podido hacer en menos de 3 años, tanto así que Juan dice que ningún todos los libros del mundo podrian contener las cantidad de obras que Jesús hizo cuando estuvo en la tierra.


Jesús paso tres años con doce personas que el deseaba que entendieran cual era la prioridad de Él durante su estadía en la tierra. Y me di cuenta que su mayor tiempo lo dedico a predicar acerca del reino de los cielos y a sanar enfermos, limpiar a los leprosos, ayudar las causas de los mas necesitados como las viudas, los niños, los ancianos.

Y cuando Jesús asciende al cielo vemos a sus once discípulos siguiendo los mismos pasos de su maestro, entregando sus bienes por aliviar el dolor de los más pobres, sanaron a los enfermos, predicaban acerca del reino de los cielos, ayudaban a resolver las causas de los indefensos. Realmente entendieron sus seguidores que la prioridad de Jesús aquí en la tierra era que puedan experimentar un poco del cielo a los que toda su vida vivieron en sufrimiento.

Ahora me he vuelto a preguntar ¿A caso Dios odia a la humanidad? Y digo NO, Dios AMA la humanidad y lo demostró hace dos mil años, la pregunta que ahora me formulo es ¿Las personas que decimos creer en Jesús AMAN la Humanidad? Allí donde encuentro el dilema.

Dios ya no enviará a Jesús de nuevo para predicar, ni sanar, ni defender la causa de los mas indefensos, ya que lo hizo una vez y dejo huellas para que siguiéramos sus pisadas, pero muchos aun no nos hemos dado cuenta que la humanidad aun se pregunta donde esta Dios en todo estas desgracias y Dios desde el cielo se pregunta ¿Dónde están mis hijos en todas estas desgracias?

Dios tiene solo el recurso humano para aliviar algo del sufrimiento de los indefensos, para defender las causas de los mas pobres pero aun no despertamos del cuento de hadas que nos han hecho creer que nosotros no podemos hacer nada ante tanta maldad e indiferencia, que le suceden a los más indefensos, que solo nos toca orar y pedirle a Dios que actué, y Dios dice pero si a través de Jesús les mostré que la oración es para tomar ànimo, coraje, direcion, valor y esperanza para actuar ante tanta desgracia y aliviar el sufrimiento que este mundo esta teniendo.

Cuando te vuelvan a preguntar ¿Dónde esta Dios ante tanta maldad?, puedas decirle que Dios me encomendó ese trabajo a mi y lo estoy haciendo con prontitud.